El Can Perla Golf se encuentra en Cala Murada y ofrece alojamiento con piscina privada, patio y vistas a la piscina. El alojamiento se encuentra a 46 km de Playa de Palma y dispone de aire acondicionado, aparcamiento privado y WiFi gratuita.
La villa cuenta con 5 dormitorios, TV de pantalla plana con canales vía satélite, cocina equipada con lavavajillas y microondas, lavadora y 3 baños con bañera de hidromasaje.
La villa dispone de terraza. Los huéspedes pueden nadar en la piscina al aire libre, practicar senderismo o snorkel, o relajarse en el jardín y utilizar la zona de barbacoa.
El Can Perla Golf está a 44 km de El Arenal y a 46 km de Alcudia.
Información sobre el anfitrión
Soy un apasionado de la acogida desde 2015, empezando por el alquiler de un apartamento en Ibiza. Lo disfruté tanto que también quise hacerlo en Austria en verano e invierno. Así que en 2018 empecé a buscar propiedades en Austria para realizar esta idea y me especialicé en ella. Desde julio de 2018, alquilo con éxito alojamientos especiales para vacaciones bajo la marca Active Stay. No dude en visitar mi sitio web Active-Stay com.
Ca'n Perla Golf es una finca independiente de color rojo rubí en Cala Murada. Debido a la forma de U, la casa de campo de una sola planta de 300 m² alberga una enorme terraza parcialmente cubierta. Aquí encontrará una cocina exterior, una amplia mesa de comedor y, por supuesto, tumbonas y muebles de salón donde podrá disfrutar plenamente de las vistas de la enorme finca verde con piscina, palmeras y limoneros. Una pista de petanca privada, un pequeño campo de golf y arena para jugar al voleibol de playa hacen de esta propiedad de 3.200 m² la perla perfecta para las vacaciones.
Cala Murada toma su nombre de la hermosa bahía de baño del mismo nombre. Esta bahía, "Cala" española, pertenece a toda una cadena de bahías de ensueño, las llamadas Calas de Mallorca. Cala Murada se compone de un antiguo núcleo de población y de fincas dispersas en el verde paisaje. Cuenta con restaurantes, supermercados y todo lo necesario para las necesidades diarias. La gestión durante todo el año también permite unas tranquilas vacaciones de invierno en Cala Murada. Afortunadamente, aquí no encontrará grandes hoteles ni edificios de apartamentos. La bahía de Cala Murada ofrece una hermosa playa y aguas cristalinas con oleaje medio. Aquí los veraneantes pueden disfrutar del sol y el mar o conocer la cocina regional en el restaurante con vistas al mar. Durante la temporada alta, el bar de la playa y un servicio de alquiler de barcos están abiertos. Justo detrás de la bahía, un idílico torrente desemboca en un pequeño estanque donde las aves retozan. Por supuesto, las otras calas no están lejos. A través de un sendero se puede llegar a Cala Domingos en otros 10 minutos. Y también las otras calas, en parte gestionadas, en parte intactas y, por tanto, más solitarias.
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