Pros: Todo. El tamaño grande de las camas, Netflix, la cercanía a la Ciudad de las Artes y Ciencias (4 min a pié), la simpatía de su dueño Raúl, que hubiese hasta champú o aceite, sal... sin necesidad de comprar estas cosas para unos días, que tuviera párking incluido y aunque chiquitina, que tuviera terraza.
Contras: Hasta el último momento gestionando la reserva online el apartamento era para 2 personas con 2 habitaciones. En el momento de hacer el pago online cambió a poner 1 habitación para 2 personas. Esto es importante saberlo dependiendo de con quién se viaje. No obstante tras el pago hablé con su dueño, Raúl, que es muy majo, y me aseguró que podría disponer de las 2 habitaciones, como así fue finalmente. :-) Así que sin problema.