Pros: - Ubicación inmejorable, al lado de los jardines de Murillo, y cerca del Alcázar, Catedral… pero también a un paseo de la Torre del Oro, Torre de la Plata, del Parque de María Luisa, con la famosa Plaza de España en su interior entre otros, etc. - En cuanto al apartamento, es pequeño, tipo estudio, pero bien distribuido y completamente reformado. Mientras nosotros estuvimos allí el ambiente fue completamente tranquilo, lo cual se agradece a la hora de descansar. Es un ático, situado en una tercera planta creo, no tiene ascensor, pero como ya se avisa de esto en la descripción, no me parece que sea un punto negativo puesto que el que va allí, ya está avisado de este hecho. Cuenta con mucha iluminación a través de varias ventanas, (en el baño también), eso sí, ninguna tiene persiana, las que pegan a la cama de matrimonio y al sofá-cama (que dan a patios interiores) tienen cortinas opacas que impiden el paso de la luz, pero la del ventanal que da a la terracita no, por lo que si os molesta la luz para dormir, llevad un antifaz. La terracita da a plaza de acceso al piso, tiene una mesita y cuatro sillas. El baño es ajustado, pero para nosotros estuvo bien. Cuenta con mesa y 4 sillas, ropa de cama, toallas, secador, plancha, planchador, tv (colgada en la pared), aire acondicionado, armario empotrado con bastantes perchas, nevera pequeña (con pequeño congelador también), microondas, lavadora, (aunque pinzas para tender solo habían 5), y una cocina de vitrocerámica (o de inducción, como no llegamos a usarla así que no lo sé cierto). Como punto a favor, en los armarios podías encontrar un poco de todo, desde Cola-cao, azúcar, sal, galletas, aceite de oliva y de girasol, infusiones, sartenes/ollas, servilletas, vasos, platos, cubiertos, etc. Muy completo todo. - Por lo demás, hemos tenido una estancia muy agradable y una muy buena impresión de todo; y qué decir de Sevilla, es magnífica y hay tanto que ver que nunca acabas, volveríamos una y otra vez.
Contras: Respecto a las camas, como ya he mencionado contaba con una cama de matrimonio y un sofá-cama. La cama muy cómoda, pero el sofá-cama era durísimo, la parte central por donde está la unión, más duro aún, es la única parte negativa que le hemos visto al apartamento, la gran incomodidad de éste. — LO SIGUIENTE NO SON ASPECTOS NEGATIVOS, SINO POSITIVOS, PERO LO PONGO AQUÍ PORQUE NO TENÍA MÁS ESPACIO — - A destacar que, cuando llegamos al apartamento, en pleno agosto a las 14h, hacia un calor insoportable en la calle, pero Esther tuvo el detalle de dejar el aire acondicionado enchufado en el apartamento, por lo que cuando llegamos estaba todo fresquito, fue una gozada. - En relación a la limpieza, todo correcto. - La comunicación con Esther muy fluida todo el tiempo, antes y durante la estancia, siempre amable y dispuesta a ayudar. Un encanto de persona. - El aparcamiento, eso sí, era complicado, el parking al aire libre con vigilante por 1€ que se menciona en otro comentario, queda a 15 minutos andando y no tiene vigilancia nocturna, las demás calles alrededor de éste quedan a la misma distancia aprox., y son difíciles, la mayoría zona azul (de pago). Nosotros en una de esas, dando vueltas buscando aparcamiento el segundo día, encontramos una calle paralela a la avenida principal a la que da el apartamento (Avenida Menéndez Pelayo), que aparcando sobre la misma altura en la paralela, caminábamos después a través de una calle interior que cruza unos bloques de pisos, llegando al apartamento en 5 minutos. Así que descubierto este sitio que no era de pago y estaba tan cerca, ya lo dejamos ahí el resto de veces. La calle es José María Moreno Galván, y la calle interior por la que cruzábamos a la Av. Menéndez Pelayo (y de ahí al apartamento en la Plaza de los Curtidores) es Calle Alcalde Isacio Contreras. *Recomendación personal: no dejes de visitar en Santiponce la ciudad romana de Itálica, está cerca de Sevilla y es algo único de ver (la entrada es gratuita).