Pros: La atención del personal es excelente, tanto Merle quién estaba en la recepción durante el día como el personal nocturno siempre nos ayudaron con lo que necesitábamos. Por ejemplo, en la habitación no teníamos caja fuerte, pero Merle se encargó de conseguirnos una, traerla hasta la habitación y explicarnos cómo usarla; también solicitamos unas colchas ya que de noche teníamos algo de frío y muy amablemente nos trajo mantas nórdicas impecables y se ofreció a colocarlas ella misma en las camas. Te hacen sentir como si estuvieras en la casa de un amigo!! La limpieza también es muy buena, y el personal es muy amable. Es super silencioso, tranquilo y seguro. Tuvimos baño compartido y siempre estaba en óptimas condiciones, con papel, jabón y limpio. La zona durante el día es excelente, hay un café abajo donde se pueden comer cosas riquísimas y a buen precio, además de que es moderno y está atendido por gente con muy buena onda. También tiene menú para almorzar, que ofrece opciones pensadas para gente que trabaja por la zona en oficinas, etc. Está cerca del subte y a cuadras de lugares clave.
Contras: Las instalaciones podrían estar mejor, es un edificio viejo y hay poco mantenimiento. El empapelado de las paredes por partes se salía, había poca luz en las habitaciones, el colchón que me tocó era de mala calidad, como de goma espuma (aunque a mi madre le tocó uno muy bueno). Es lo único malo! Por las noches no había mucho movimiento, pocos bares cerca, poca gente caminando, nos hubiera gustado poder disfrutar un poco más de la noche de Barcelona. Solo había supermercados abiertos.