Pros: - el sitio es muy bonito, limpio y tranquilo (sobre todo teniendo en cuenta que está en una estación de trenes) - la cama es muy cómoda - hay un saloncito antes de entrar en las habitaciones muy acogedor y abajo la zona común también es un gustazo - el personal es muy bueno, atento y super amables - la ubicación es estupenda, al lado de todo - el sistema de acceso por app es original, aunque tienes que tener siempre el móvil a mano y con batería, pero se pierde el “miedo” a perder la llave
Contras: - falta zona de cocina, solo tiene microondas y una nevera - las escaleras de las camas son una trampa mortal, es difícil subir hasta la cama porque son muy estrechas y arriba está la barra de la cortina, por lo que te la comes si o si - no hay luz individual en cada cama, solo un enchufe, con lo cual si quieres leer tienes que negociar con los otros 15 compis de habitación. - el aire acondicionado estaba a tope y era aire frío. Pedí que lo apagasen, ya que al día siguiente teníamos la maratón y necesitábamos dormir lo mejor posible, y la chica (muy maja, eso sí) se ve que lo que hizo fue bajarlo o algo, porque seguía dándome el aire directamente al tener la cama justo frente a la salida del aire. Como resultado he dormido bastante mal y me he tirado toda la maratón (y ahora ya en mi casa) con estornudos, mocos y malestar
